Para Frani.
Frani y yo fuimos ardillas en nuestras vidas anteriores.
Lo sé porque nos encanta alimentarnos de semillas,
a Frani nueces, a mi dejame las almendras.
Nos gustan los mismos aromas,
los aromas otoñales, que es la estación de las ardillas.
El aroma de las manzanas asadas con canela y vino tinto.
Tenemos dedos de ardillas, finitos y largos, ágiles y rápidos,
para descascarar cualquier cosa, hasta corazones duros.
Y nos gusta un poco de frío, para acurrucarnos bajo una manta
y dejar correr el tiempo, Frani pintando,
a mi dejame la lectura.
Fuimos ardillas, lo sé... y seguramente compartimos el mismo nogal
lo supe la primera vez que lo cargué en mis brazos y me sentí fuerte,
lo supe la primera vez que me miré en sus ojos profundamente sabios.
4 comentarios:
Divino Lau! me encantó.
Gracias Lucita!
Allá lejos y perdido resultó que tenías un corazón! Te quiero.
Te quiero monstrua!!
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